miércoles, 29 de octubre de 2008

Pelele vilipendiado

He de comenzar advirtiendo que el siguiente texto es un fiel reflejo de la sociedad que nos ha tocado vivir. A pesar de estar centrado en las televisiones es perfectamente trasladable a cualquier ámbito y sector laboral.

Esta historia comienza en el verano del 2007 cuando entro en el circuito laboral y en el momento exacto en el que las cadenas de televisión, grandes y magnánimas, prefirieron hacer contratos basura a los profesionales antes que hacer el esfuerzo por contratarles de manera indefinida.

Es algo lógico que consigan hacer beneficios en sus libros de cuentas (Sogecable consigue mejores resultados a cada semestre), aunque el resto de la industria audiovisual vaya mal. Las televisiones generalistas son agresivas a la hora de contratar a los nuevos componentes del engranaje técnico. Se van 2 y viene 1. Eso sí, su vida dentro de la empresa es de un máximo de 6 meses o de 2 años y medio, depende del “contrato basura” que te ofrezcan. Premisa fundamental y casi doctrina: uno no puede salir de allí sin haber sido explotado con antelación.

Se sirven de ingenios legales para contratar una y otra vez a la misma persona con un contrato por ETT. O bien exprimen al máximo a esos insignificantes seres llamados “becarios”, ingenuos y no licenciados, por 300 insignificantes e insuficientes euros te hacen el trabajo de uno de 2000€. Remarquemos con más fuerza “no licenciados”, ya que la empresa sabe que el licenciado tiene un estatus ligeramente “superior” al universitario no licenciado y de los 700€ no bajaría esa gran primer contrato.

Supongo que dentro de este grupo de chupópteros siempre hay clases.

Tenemos a esa cadena de supuesto corte “socialista” que tras dos años y medio de contratos por ETT a casi la mitad de la plantilla técnica no los renueva y los obliga a entrar en su juego; o bien consigues irte a otro sitio por que eres muy bueno en lo tuyo o vas a la “oficina” cada lunes para que te contraten una y otra vez de manera semanal, sin saber si la próxima semana tendrás el trabajo suficiente como para que te paguen. Así hasta que venzan los dos años que exige la Ley para poner el contador a cero del “contrato por ETT”.

Pero también esta esa otra cadena que tiene por jefe a un viejecito italiano, bien aseado, muy repeinado y que reformula las leyes de su país en beneficio propio. Tienen, él o sus directivos-títeres de España, la poca vergüenza de cambiar el trabajo de un profesional por el de un becario. Esto resulta, ya, una práctica normal en las grandes televisiones de ámbito nacional. El límite lo sobrepasan al ampliar el contrato en prácticas de 5 horas a 8 horas entre semana, y 12 horas sábados y domingos pagando tan solo 15€ más al mes a lo inicialmente acordado, incluir también la rotación de turnos que incluyen los fines de semana.

Acumulemos pues las ilegalidades cometidas, ya no contra la legalidad vigente sino contra la persona y la propia moralidad humana: impago de horas extra, impago de horas por nocturnidad, sobrepaso de 8 horas diarias para el contrato en prácticas, derecho a tan solo una comida en el comedor de la empresa cuando la jornada es de 12 horas, y así un largo etcétera del que se sirven para no contratar a un profesional con experiencia reconocida en su debido puesto.

No pido que se pague a estos profesionales una sustanciosa cantidad por su esfuerzo laboral, pero lo mínimo sería un trato, y por lo tanto pago, justo y digno.

En definitiva el técnico de televisión es un pelele vilipendiado por los titiriteros de las televisiones.

Todo lo dicho aquí es un extracto de lo que ocurre en las televisiones y empresas de comunicación en general. Todo esta escrito a partir de vivencias personales y ajenas (contadas de primera mano), y refleja la rabia que contengo hacia este sector laboral.

3 comentarios:

Jesús V.S. dijo...

Me parece bien que crees opinión de esta manera, con datos reales, vivencias, de primera mano. Yo desconozco lo que pasa, salvo lo que me has comentado alguna que otra vez, asique me permito el no comentar sobre ello.

Un abrazo chaval. :)

S. Vigara dijo...

Así me gusta Pablo, ¡que no se libre ni el Tato de las críticas bien merecidas!

Anónimo dijo...

joder, macho, tienes toda la razón. la mierda es que todo eso o es legal o nadie lo castiga. y que siempre habrá alguien que lo justifique diciendo que los jóvenes tienen que aprender o que como ellos pasaron por ese aro nosotros debemos hacer lo mismo.

creo que la solución está en pasar de esas becas y esos trabajos, no dejar que nos exploten e intentar montar algo por cuenta propia. sí es difícil pero es mejor y más gratificante trabajar para uno mismo que para un cabrón. la pregunta es: ¿estará la gente joven dispuesta a ello?

saludos.